UNIDAD DE URGENCIAS
El grado de una urgencia oftalmológica puede depender de los síntomas y de su duración, la mayoría de los casos se resuelven satisfactoriamente sin consecuencias para la visión, sin embargo en ocasiones puede tratarse de situaciones graves y su solución suele estar condicionada a la rapidez con que se realice el diagnóstico y se instaure el tratamiento adecuado.
Recomendamos acudir a una unidad de urgencias ante las siguientes situaciones:
Disminución o pérdida brusca de visión (acudir inmediatamente).
Traumatismo ocular (acudir inmediatamente).
Dolor ocular (acudir inmediatamente).
Visión doble, moscas volantes, flashes (acudir en un plazo no superior a los 2 días desde el inicio de los síntomas).
Ojo rojo o inflamado, picor, lagrimeo, secreciones (acudir en un plazo no superior a los 4 días desde el inicio de los síntomas).
DISMINUCIÓN O PÉRDIDA DE VISIÓN
La disminución o pérdida repentina de visión siempre es una urgencia oftalmológica, incluso si la pérdida solo es parcial. No se ha de suponer que esta afección va a mejorar sin tratamiento y deberá acudir a su oftalmólogo inmediatamente. La mayoría de las formas graves de pérdida de la visión son indoloras y esta ausencia de dolor de ninguna manera disminuye la necesidad de recibir atención médica urgente. Entre las causas más frecuente de pérdida de visión tenemos:
Desprendimiento de retina, es la separación de la retina neurosensorial del epitelio pigmentario, trae como consecuencia que esta estructura se quede sin riego sanguíneo provocando la pérdida de visión. El síntoma característico es la aparición de un «telón» negro en el campo visual. El desprendimiento inicial puede ser localizado, pero sin tratamiento suele extenderse, afectando finalmente a toda la retina.
Desprendimiento de vítreo, puede preceder a un desprendimiento de retina y suele manifestarse por la visión de puntos o moscas volantes que se hacen más evidentes al mirar una superficie de color claro y con luz brillante.
Hemorragia vítrea, se presenta como consecuencia de alteraciones de los vasos retinianos, con frecuencia asociados a retinopatías diabética, hipertensiva, oclusiones vasculares, etc.
Inflamación del nervio óptico, puede causar pérdida de visión brusca, indolora y unilateral, así como también defectos en el campo visual.
Oclusión de arterias y venas retinianas, estos procesos vasculares también pueden cursar con disminución de agudeza visual brusca, indolora y unilateral.
TRAUMATISMOS OCULARES
Los traumatismos oculares son una causa frecuente de consulta en los servicios de urgencias, afectan con mayor frecuencia a personas en edad productiva con un promedio de 30,6 años, el sexo masculino representa el 87% del total de los casos y son responsables de alrededor del 30% de los casos de ceguera unilateral en la primera década de la vida. Los traumatismos pueden ser perforantes o no perforantes y los más habituales son:
Erosión corneal, es una lesión superficial muy dolorosa que con frecuencia se produce por un arañazo con las uñas, por la hoja de una planta o una hoja de papel. Si estas lesiones se tratan adecuadamente suelen curar en un plazo de 24 a 48 horas.
Cuerpos extraños, es una causa de urgencia muy frecuente, pueden proceder del viento o estar relacionados con la manipulación de ciertos materiales. La situación se puede resolver fácilmente en urgencias con la extracción del cuerpo extraño con o sin oclusión ocular.
Contusión ocular, se producen cuando el globo ocular sufre un impacto directo con un objeto contundente, sucede con frecuencia en los accidentes de tráfico, durante la práctica de deportes, peleas, etc.
Perforación ocular, son heridas penetrantes producidas por objetos puntiagudos, alfileres, cuchillos, lápices, trozos de vidrio, juguetes, etc. La perforación ocular es una situación muy grave, por lo que es importante acudir al oftalmólogo de urgencias de inmediato.
Quemaduras por rayos ultravioleta, se deben a una exposición excesiva, a la luz solar, máquinas de rayos UVA o máquinas de soldadura, provocan lesiones superficiales de la córnea que producen dolor y visión borrosa.
Quemaduras químicas, generalmente son provocadas por productos de limpieza, de laboratorio o por líquido de batería. Las quemaduras químicas, especialmente las provocadas por álcalis, pueden provocar graves pérdidas de visión. Para minimizarla en lo posible, es importante que el paciente lave el ojo inmediatamente con abundante agua del grifo. A menudo, la gravedad de la lesión dependerá de este lavado inmediato, más que del tratamiento.
DOLOR OCULAR
Una de las urgencias oculares que suele causar un dolor muy intenso (“dolor de clavo”) es el glaucoma agudo. Este dolor se percibe en todo el globo ocular y sus alrededores. Este síntoma puede ir acompañado de visión borrosa, ojo muy rojo, así como de náuseas y vómitos. Ante esta situación el paciente debe acudir a urgencias de forma inmediata.
OJO ROJO
El ojo rojo es una causa frecuente de urgencia oftalmológica, este término médico no específico se refiere al enrojecimiento de la porción anterior del ojo que puede detectarse a simple vista. La causa es una dilatación de los vasos superficiales de la conjuntiva bulbar que también aumentan en número y tortuosidad. Entre las causas más frecuentes de ojo rojo tenemos:
Conjuntivitis, es la inflamación de la conjuntiva, membrana mucosa que recubre el interior de los párpados y que se extiende a la parte anterior del globo ocular, pueden ser infecciosas, virales o alérgicas, las primeras pueden ser muy contagiosas y pueden complicarse si no se tratan adecuadamente
Queratoconjuntivitis, es la inflamación de la conjuntiva y la córnea, en muchas ocasiones provocadas por el uso prolongado de lentes de contacto o intolerancia a los productos de limpieza. Si no se toman las medidas adecuadas pueden llegar a provocar una úlcera corneal.
Escleritis y epiescleritis, son causas de enrojecimiento ocular provocadas por inflamaciones de la esclera y la epiesclera.
Uveítis, son inflamaciones de la úvea que cursan con disminución de la agudeza visual, dolor y fotofobia. No produce secreciones externas (legañas), lo que la distingue de otras causas de ojo rojo.
Hemorragia o “derrame” subconjuntival, es una causa frecuente de ojo rojo, se produce por la rotura de un vaso conjuntival, suelen se espontáneas y desaparecen sin dejar secuelas.