Cirugía de la presbicia con lente intraocular multifocal

¿Qué es la presbicia o vista cansada?

En el proceso de envejecimiento de los seres humanos se producen una gran cantidad de cambios, nuestros ojos, como parte de nuestro cuerpo, también se ven afectados por estas transformaciones que condicionan la calidad de la visión y empeoran con los años. La presbicia o vista cansada es la pérdida gradual de la capacidad para enfocar objetos cercanos. Aparece de forma fisiológica en todas las personas a partir de los 40 años, como consecuencia de la pérdida paulatina de la elasticidad del cristalino, que se hace cada vez más rígido, impidiendo que se realize el enfoque adecuado en esa distancia.

 

¿Cuales son los sítomas?

Aunque la prebicia es un proceso fisiólogico y por lo tanto absolutamente normal, su progresión suele resultar muy incómoda y afecta la calidad de vida de muchos pacientes. Entre los síntomas más frecuentes tenemos:

  • Dificultad para enfocar objetos cercanos (menos de 50 cm.).
  • Necesidad de alejar los objetos para facilitar su enfoque y verlos mejor.
  • Cansancio, con frecuencia acompañado de cefaleas al intentar hacer esfuerzos para enfocar.
  • Al realizar esfuerzos continuados puede producirse picor, escozor, lagrimeo, ojo rojo, sensación de arenilla, etc.


Cirugía de la presbicia

Hasta hace unos años la presbicia solo podía tratarse mediante gafas o lentes de contacto, actualmente disponemos de una técnica quirúrgica que soluciona de forma conjunta y permanente estas afecciones oculares ocasionadas por la edad, se trata de la cirugía faco-refractiva con o sin catarata asociada. La técnica consiste en sustituir el cristalino, por una lente intraocular multifocal capaz de realizar las funciones de enfoque en las diferentes distancias, cerca, intermedia y lejana.

 

 

  • La visión cercana se sitúa en distancias inferiores a 50 cm. es la distancia habitual de lectura, escritura, uso del móvil, etc.
  • La visión intermedia se sitúa a una distancia de entre 50 cm. y 1 metro, se corresponde con la distancia en la que utilizamos un ordenador, utensilios de cocina, etc.
  • La visión lejana, comprende distancias superiores a 1-2 metros, son las distancias en que solemos ver la televisión, conducir, etc.

Por la experiencia acumulada en los últimos años se puede afirmar, que la cirugía de la presbicia con lente intraocular multifocal es una técnica fiable y segura, que se realiza de forma ambulatoria, con anestesia tópica, sin necesidad de suturas, la duración es de unos 20-30 minutos y la recuperación visual es rápida.

Libérate de las gafas y disfruta tu libertad!!!

Oftalmólogo Barcelona – Cedilás Oftalmología

Diputación 238/Balmes – Barcelona – Tel . 93 302 6030 – Cita online: https://www.cedilas.es/pide-hora/

 

Hasta hace unos años los defectos refractivos como la miopía, hipermetropía y astigmatismo, solo podían corregirse utilizando gafas o lentillas. Por un lado, las gafas con frecuencia provocan aberraciones visuales, limitaciones en el campo de visión y en muchas ocasiones resultan incómodas o antiestéticas.

Por otro lado, las lentes de contacto en un número importante de portadores no son bien toleradas, o surgen problemas a la hora de cumplir las necesarias medidas de higiene y mantenimiento.

Actualmente estos defectos refractivos pueden corregirse utilizando uno de los más significativos avances tecnológicos dentro de la oftalmología, el Láser Excimer.

Cedilás Oftalmología, un centro especializado en Cirugía Refractiva, con más de 25 años de experiencia, te ofrece la oportunidad de conseguir ese objetivo con la mayor fiabilidad y seguridad.

 

Quienes pueden operarse

Esta intervención debe realizarse en centros cualificados y por oftalmólogos con experiencia. Antes de proceder a su indicación formal se debe realizar un examen oftalmológico completo, que incluya, refracción, medición de la presión intraocular, valoración de la película lagrimal, campimetría, fondo de ojo, paquimetría y topografía corneal, con estas pruebas podemos determinar si el paciente padece algún tipo de enfermedad o alteración ocular que contraindique la intervención, reduciendo drásticamente la posibilidad de complicaciones.

En términos generales el paciente debe reunir una serie de condiciones para ser candidato a la intervención:

  • Tener más de 18 años de edad.
  • Ser miope de 1 a 8 dioptrías o hipermétrope de 1 a 5 dioptrías con o sin astigmatismo asociado.
  • El defecto refractivo debe mantenerse estable durante al menos dos años antes de la intervención.

 

En qué consiste la intervención

El LASIK (Laser Assisted in Situ Keratomileusis) es la técnica quirúrgica que utilizamos en la mayoría de nuestros pacientes y consta de cuatro pasos fundamentales:

 Paso 1: Se instila un colirio anestésico sobre las capas superficiales del ojo.

Paso 2: A continuación se realiza un colgajo o flap corneal quedando expuestas las capas internas de la córnea.

Paso 3: Se activa el Láser Excimer que actúa sobre estas capas internas, moldeando la córnea de forma homogénea y eliminando los errores de refracción.

Paso 4: Finalmente se repone el colgajo corneal sin necesidad de suturas y se da por concluida la intervención que dura aproximadamente 5 minutos.

  

Evolución y recuperación

La mayoría de los pacientes refieren visión borrosa inmediatamente después de la cirugía, sin embargo esta situación mejorará al cabo de unas cuantas horas, y transcurridos pocos días se alcanza una buena visión.

Es habitual que durante las primeras horas de la intervención el paciente tenga los ojos ligeramente enrojecidos y con sensación de “arenilla”. No obstante estas molestias son leves y se controlan con la instilación de colirios antiinflamatorios y lágrimas artificiales.

 

Utilizamos la tecnología más avanzada

Cedilás Oftalmología se mantiene  a la vanguardia en las técnicas de cirugía refractiva, incorporando la tecnología más avanzada, el Láser Excimer Baush & Lomb -Technolas Teneo 317

 

 

Este nuevo láser de última generación, aporta una serie de ventajas respecto a la mayoría de los láseres que se utilizan en la actualidad:

  • Mayor Precisión
  • Más Seguridad
  • Doblemente veloz (100 impulsos/segundo)
  • Más potencia de alcance (500 Hz)
  • Máxima precisión (spots de 1mm)
  • Mejor reconocimiento del iris
  • Mejor alineamiento respecto a los movimientos oculares

Todas estas nuevas prestaciones dan como resultado una eficacia y unos resultados sin precedentes en la corrección de los defectos refractivos (miopía, hipermetropía y astigmatismo).

 

 

Solicitar hora de visita

Puedes solicitar tu 1ª Visita Gratuita haciendo clic en el siguiente enlace:  

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También llamando al teléfono 93 302 6030 

(10 a 2  y  4 a 8 – excepto viernes tarde).

Como detectar la miopía en niños

Dr. Gustavo Vincent – Oftalmólogo Barcelona

 

Cuando un niño no tiene una buena visión, generalmente no es consciente de que padece un problema visual. Por esta razón es muy importante que a partir de los 4 años de edad, los padres en casa  y los maestros en la escuela estén pendientes por si existiera alguna señal de alerta que indique que el niño tiene algún defecto refractivo, en este caso miopía. La miopía es un defecto refractivo en el que el ojo es de mayor tamaño de lo habitual para la edad. Como consecuencia, el niño pierde capacidad para la visión de lejos, y suele ser progresiva.

La detección precoz de estos defectos es fundamental en los primeros años de vida cuando se desarrolla nuestro sistema visual. En el pasado no era frecuente ver a un niño con gafas como consecuencia de la miopía. Hoy en día ocurre lo contrario, la miopía es uno de los problemas visuales más comunes y suele evolucionar más allá de la adolescencia. Si no es detectada a tiempo puede ser una de las principales causas de fracaso escolar.

Causas de miopía en niños:

  • Genéticas: la miopía es hereditaria en la mayoría de las situaciones. Se ha comprobado que los padres con miopía tienen más probabilidad de que sus hijos sean miopes.
  • Factores ambientales: la digitalización de la época moderna también ha agudizado la aparición de los defectos refractivos ya desde la infancia por el uso prolongado de los dispositivos móviles, ordenadores o tablets. Un estudio llevado a cabo en China concluyó que en niños de primaria que pasaban 40 minutos adicionales al aire libre tenían un 23% menos de probabilidad de sufrir miopía que los que no lo hacían.

 Síntomas de miopía en niños:

  • Se quejan de que no ven bien la pizarra en el colegio.
  • Se sientan muy cerca de la televisión.
  • Cierran mucho los ojos para ver mejor.
  • No reconocen bien a las personas hasta que las tienen cerca.
  • Dibujan figuras grandes para verlas mejor.
  • Se acercan mucho a los libros para leer.
  • Suelen tener problemas de aprendizaje escolar.

Ante cualquiera de estos síntomas es importante acudir a un oftalmólogo para realizar una valoración visual completa y determinar si necesita algún tipo de corrección óptica (gafas). De esta manera podemos evitar, en la medida de lo posible, la progresión del defecto visual, o bien, problemas de aprendizaje.

 

Como afectan los ordenadores la visión en los niños

Dr. Gustavo Vincent – Oftalmólogo Barcelona

 

Los ordenadores, las tablets y los móviles, son habituales en el mundo de los adultos… ¡Pero también en el de los niños! La exposición continuada a sus pantallas puede ocasionar visión borrosa, picor de ojos, dolores de cabeza, ojos secos y otros síntomas de fatiga visual. Estas molestias pueden deberse a una iluminación escasa, deslumbramientos, una configuración incorrecta del lugar de trabajo, problemas de visión no corregidos o una combinación de estos factores. Los niños pueden experimentar los síntomas derivados del uso de ordenadores incluso más que los adultos.

Según el estudio “Impacto de los ordenadores en la visión infantil” (Impact of computer use on children’s visión), realizado por N. Kozeis, de la unidad de oftalmología pediátrica del Hippokratio Hospital, de Tesalónica (Grecia), algunos aspectos específicos de la forma en la que los niños usan ordenadores, pueden hacerlos más susceptibles que a los adultos para desarrollar estos problemas. La mayoría de los niños son capaces de realizar tareas que les divierten (por ejemplo, jugar a videojuegos), con una alta concentración, durante muchas horas, hasta que quedan exhaustos, haciendo pocos descansos o ninguno. 

La actividad prolongada sin descansos puede exigir un esfuerzo excesivo de enfoque e irritación ocular. Cuando una persona (un adulto o un niño), pasa demasiado tiempo mirando algo con mucha concentración, la frecuencia de su parpadeo disminuye, lo que impide una correcta distribución de la lágrima y favorece el ojo seco. Por otro lado, el hecho de que las pantallas se coloquen más altas que un libro o una revista, obliga a abrir más los ojos, lo que favorece la evaporación de la lágrima.

Los niños se adaptan bien a diferentes entornos, lo que hace que, con frecuencia, ignoren los problemas. Un niño puede estar mirando la pantalla de un ordenador con una iluminación muy fuerte, sin pensar en cambiar los ajustes de brillo o las circunstancias del entorno, para conseguir una visión más cómoda. Esto puede provocar fatiga ocular excesiva. Además, los niños, a menudo, no son conscientes de que tienen visión borrosa causada por un error de refracción, ya que creen que todo el mundo ve de igual forma que ellos.

Dado que la mayoría de los lugares de trabajo con ordenador están pensados para el uso de adultos, los niños no están cómodos en ellos. Un niño que usa un ordenador en un escritorio o una mesa normal, a menudo debe mirar más hacia arriba que un adulto. Dado que el ángulo de visión más eficiente es el que obliga a mirar hacia abajo unos 15 grados, es habitual que el pequeño experimente fatiga visual antes que un adulto. Por otro lado, los niños pueden tener dificultades para alcanzar el teclado o colocar los pies en el suelo, lo que favorece la aparición de molestias en los brazos, el cuello o la espalda.

Por otro lado el nivel de iluminación para el uso adecuado de un ordenador es aproximadamente la mitad de brillante que el que normalmente se encuentra en un salón de clase. El aumento de los niveles de luz pueden contribuir al deslumbramiento excesivo y a los problemas asociados con los ajustes del ojo a diferentes niveles de luz.

Se debe tener en cuenta que los menores tienen necesidades diferentes a los adultos para usar un ordenador cómodamente. Para reforzar los hábitos de visualización apropiados y garantizar un uso cómodo y agradable de las pantallas, es importante hacer que el niño siga las siguientes normas:

  • Pasar revisiones visuales frecuentes que confirmen de que el niño ve de una forma clara y cómoda. Si usa el ordenador con frecuencia, debe pasar, al menos, un examen visual anual.
  • Hacer un descanso de diez minutos por cada hora que mira la pantalla evitará la aparición de problemas de acomodación e irritación ocular.
  • Ajustar la posición del ordenador a sus necesidades.El monitor del ordenador y el teclado deben ajustarse de acuerdo con los parámetros del cuerpo del niño. La pantalla y la mesa no deben estar situadas demasiado altas y la silla no debe ser demasiado baja. A veces, el niño puede necesitar un taburete para apoyar los pies.
  • Revisar la iluminación para detectar reflejos en la pantalla del ordenador. Las ventanas u otras fuentes de luz pueden crear reflejos en la pantalla. Cuando esto ocurre, el escritorio o la pantalla del ordenador deben girarse en otra dirección.
  • Reducir la cantidad de iluminación en la habitación.Procurar que el espacio en el que se encuentre el ordenador tenga una luz tenue en lugar de una brillante luz cenital.

 

COVID-19: Uso de mascarilla y ojo seco

 

Muchos pacientes que acuden a nuestra consulta en estos días se quejan de sequedad ocular, así como de sensación de cuerpo extraño o de tener «tierra en los ojos». El ojo seco se produce por una falta de lágrimas o cuando esta se evapora más rápido de lo normal. Los que padecían esta alteración antes de la Covid-19 han visto cómo sus síntomas han empeorado. También se ha producido un importante aumento de ojo seco en niños y adolescentes como consecuencia de las muchas horas que pasan delante de pantallas.

La distancia social y el uso generalizado de mascarillas, han demostrado ser dos de las medidas más efectivas para protegerse del contagio por coronavirus y frenar la pandemia. Es obligatorio utilizar las mascarillas en todos los locales cerrados y cuando no se pueda garantizar la distancia social de al menos dos metros.

Debe tenerse en cuenta que los bordes y aristas de las mascarillas son duros y fabricadas a base de papel o fibra tratada, por esta razón, cuando nos la colocamos, se ha de vigilar la posición de la parte superior, ya que existe la posibilidad de que contacte con la superficie ocular sobre todo mientras hablamos. Este roce puede llegar a provocar erosiones corneales y conjuntivales, o bien resultar incómodas y en ocasiones no muy bien toleradas.

Por otro lado, a los pacientes con problemas respiratorios previos, les resulta difícil respirar  mientras la llevan y necesitan sacárselas con frecuencia. Además son  particularmente incómodas para los que usan gafas, debido a que se empañan y ensucian constantemente, pues el aire expirado sube por el espacio que queda entre  la nariz y la mascarilla y al ser más caliente y húmedo, empañan los cristales.

Pero el problema principal asociado a la mascarilla consiste, en que el flujo de aire ascendente acelera la evaporación de las lágrimas. La película lagrimal tiene una capa lipídica de protección, que retrasa la evaporación natural de los líquidos. Un flujo de aire húmedo y caliente, desestabiliza esa capa protectora y aumenta la evaporación de la película lagrimal natural, provocando los síntomas clásicos de ojo seco y sensación de cuerpo extraño.

Para intentar paliar este problema, debemos utilizar frecuentemente lágrimas artificiales. Es una medida básica que puede prevenir molestias y evitar alteraciones en la córnea y en la conjuntiva. Otra medida que puede ayudar es, colocar la mascarilla de tal forma que el aire expirado pueda salir por los laterales o por la parte inferior. A veces esta maniobra se dificulta dependiendo del tipo de mascarilla utilizada. Finalmente recomendamos mejorar  la humectación del ambiente en lugares cerrados, mediante humidificadores o colocando recipientes con agua para crear una superficie húmeda y de esta manera evitar la desecación.

Dr. Gustavo Vincent Pérez

Cedilás Oftalmología

 

Vuelta a la normalidad en las visitas al oftalmólogo

Si está planeando una visita a su oftalmólogo para un examen ocular de rutina o de urgencia, es normal que tenga dudas sobre si realizarla o no durante la pandemia del coronavirus (COVID-19). Sin embargo puede estar completamente tranquilo pues los oftalmólogos, al igual que todos los profesionales en medicina, practican normas estrictas de higiene y desinfección para evitar contagios.

La limitación de contacto físico entre las personas es clave para ayudar a reducir la diseminación del coronavirus. Los síntomas, tales como fiebre, tos y falta de aire, pueden aparecer entre 2 y 14 días después de que la persona haya tenido exposición al virus. Las pacientes con infecciones severas pueden desarrollar neumonía y hasta morir de esta enfermedad pulmonar.

A medida que las clínicas oftalmológicas comienzan gradualmente a programar visitas presenciales, los oftalmólogos protegerán la salud del paciente adoptando una serie de medidas. En la clínica notará una serie de cambios en los procedimientos de los exámenes oculares con respecto a visitas anteriores a la pandemia:

  • Uso obligatorio de mascarillas.
  • Desinfección de las manos con solución hidroalcohólica.
  • Mantenimiento en todo momento de la distancia de seguridad.
  • Restricción del número de pacientes para evitar aglomeraciones.
  • Evitar asistir acompañado si no es necesario.
  • En determinados casos el personal de la clínica puede tomarle la temperatura para asegurarse de que usted no tenga fiebre.
  • Su oftalmólogo utilizará mascarilla, guantes y otros artilugios de protección.
  • Los instrumentos estarán protegidos por pantallas y se realizarán labores de limpieza e higiene después del examen.
  • Si usted llega a la clínica con síntomas de enfermedad su oftalmólogo puede instruirle que regrese a casa o se ponga en contacto con un servicio de urgencias.

El coronavirus puede diseminarse a través de los ojos, de igual manera que lo hace a través de su boca o la nariz. Cuando alguien con coronavirus tose, estornuda o habla, partículas del virus pueden dispersarse en forma de aerosol desde la boca o nariz hacia la cara de otra persona. Es muy posible que esa persona inhale estas pequeñísimas gotas (gotículas) a través de su boca o nariz, pero también pueden entrar al organismo al ponerse en contacto con los ojos.

Existe la posibilidad de que el coronavirus cause una infección ocular (conjuntivitis), situación que no es común. Si esto sucede, no se alarme, comuníquese con su oftalmólogo y siga sus instrucciones. Tenga en cuenta que si la conjuntivitis es causada por un virus o bacteria, puede diseminarse si alguien toca la secreción pegajosa o acuosa de sus ojos, o si tocan objetos que hayan sido contaminados con dicha secreción.

Lave sus manos y utilice una solución hidroalcohólica con frecuencia. No comparta toallas, contenedores de líquidos o utensilios con otras personas. Proteja sus ojos al igual que sus manos, nariz y boca, ya que es una de las formas de desacelerar la diseminación del coronavirus.

Dr. Gustavo Vincent Pérez.

Cedilás Oftalmología

Conjuntivitis por coronavirus

La Academia Americana de Oftalmología informa que el nuevo brote de coronavirus podría causar entre otras afecciones una conjuntivitis viral, que se transmite por las gotículas generadas al toser o estornudar y se ponen en contacto con la conjuntiva infectándola.

Aunque la conjuntivitis no es uno de los síntomas más comunes del COVID-19, la Academia ha hecho una serie de recomendaciones a los oftalmólogos, para que actúen de forma rápida y eficiente ante la posibilidad de que ellos sean los primeros especialistas en evaluar a estos pacientes.

En este sentido explican, que los pacientes que presenten una conjuntivitis, unida  a síntomas respiratorios, y que además han viajado o estado en contacto con personas que hayan regresado de zonas con brotes activos, como China, Irán, Italia, Japón, Corea del Sur, etc. deberá descartarse la posibilidad de que estos pacientes padezcan el COVID-19

¿Qué es el coronavirus?

Los coronavirus son una amplia familia de virus que normalmente afectan sólo a los animales, aunque algunos tienen la capacidad de transmitirse de los animales a las personas. Pueden producir desde un resfriado común, hasta enfermedades más graves.

El COVID-19 es una enfermedad provocada por un nuevo tipo de coronavirus, denominado SARS-COV-2, que fue detectado por primera vez en diciembre de 2019 en la ciudad china de Wuhan. El COVID-19, puede derivar en infecciones respiratorias severas como la neumonía, los afectados experimentan síntomas como fiebre, tos, dificultad respiratoria o conjuntivitis, que pueden aparecer entre 2 y 14 días después de haber estado expuestos al virus. Además, según un análisis publicado en The Lancet, los pacientes pueden transmitir el virus incluso antes de experimentar síntomas.

A pesar de que este nuevo coronavirus al parecer no es tan grave como el SARS-COV, que se inició en China en noviembre de 2002, ni tan letal como el MERS-COV, detectado en 2012 en Arabia Saudita, se ha propagado rápidamente por una gran cantidad de países y han provocado un número significativo de muertes en todo el mundo.

Tratamiento:

No existe un tratamiento específico ni vacunas para el nuevo coronavirus (aunque se están empleando algunos antivirales que han demostrado cierta eficacia). Sin embargo, existen diversos tratamientos para controlar sus síntomas, por lo que la asistencia sanitaria es imprescindible, a la vez que mejora el pronóstico de la enfermedad.

Prevención:

De acuerdo con las indicaciones del Ministerio de Sanidad y de la Organización Mundial de la Salud, para protegerse del COVID-19 hay que seguir las medidas genéricas de protección frente a enfermedades respiratorias, como:

  • Lavarse las manos con frecuencia (lavado con agua y jabón o soluciones hidroalcohólicas).
  • Evitar el contacto estrecho con personas que muestren signos de afección respiratoria, como tos o estornudos.
  • Mantener una distancia de un metro aproximadamente con las personas con síntomas de infección respiratoria aguda.
  • Cubrirse la boca y la nariz con pañuelos desechables mascarillas al toser o estornudar.
  • Solicitar atención médica inmediata si se tiene fiebre, tos y dificultad para respirar.

Dr. Gustavo Vincent Pérez

Cedilás Oftalmología

Usar el smartphone en la oscuridad puede provocar ceguera temporal

Usar el teléfono móvil en la cama, en la oscuridad o en condiciones de poca iluminación, puede causar una disminución o pérdida temporal de la visión, según advirtieron expertos.

Un artículo publicado en The New England Journal of Medicine, estudia el caso de 2 pacientes que asistieron al Moorfields Eye Hospital en Londres después de experimentar episodios recurrentes de ceguera temporal. El primer caso involucró a una mujer de 22 años que había tenido problemas de visión en el ojo derecho por la noche durante varios meses. El segundo caso afectó a una mujer de 40 años que experimentó durante 6 meses una discapacidad visual en uno de sus ojos.

Cuando ambas pacientes fueron atendidas por especialistas en la Unidad de Neuroftalmología del hospital, se descubrió que los síntomas de ambas mujeres se desarrollaban minutos después de haber estado visualizando la pantalla de su teléfono inteligente mientras estaban acostadas en la oscuridad.

Investigaciones posteriores mostraron que ambas pacientes, generalmente miraban sus teléfonos móviles con un solo ojo mientras descansaban de lado, y que su otro ojo estaba cubierto por la almohada. Los expertos explican, que si bien un ojo se adaptó a la oscuridad, el otro se acostumbró a la luz brillante de la pantalla del teléfono. Cuando las mujeres volvieron a utilizar ambos ojos, el que había estado mirando la pantalla no pudo adaptarse a la oscuridad, lo que provocó la sensación de pérdida de visión.

Dos de los autores experimentaron la situación por sí mismos, mirando sus teléfonos inteligentes en la oscuridad con un solo ojo y descubrieron que les tomó varios minutos para recuperarse y adaptarse a la situación de oscuridad. Los expertos señalan que en la medida que los teléfonos inteligentes se fabrican cada vez más con pantallas más brillantes, es probable que este fenómeno se vuelva más común.

 

Dr. Gustavo Vincent Pérez

Fuente: The New England Journal of Medicine.

Diagnóstico del Alzheimer con un examen ocular.

 

El Alzheimer es una enfermedad que conduce a una disfunción cognitiva grave y eventualmente a la muerte; para el año 2050 se espera que afecte a más de 115 millones de personas en todo el mundo. Desde el momento del diagnóstico hasta la muerte, el tiempo de supervivencia promedio es de poco menos de 5 años. Incluso con los avances de la medicina, un diagnóstico clínico solo se confirma post mortem, según el Dr. Manju L. Subramanian del Boston Medical Center (EEUU).

La mayoría de los pacientes estarán asintomáticos hasta una etapa posterior de la enfermedad, lo que puede resultar demasiado tarde para que las terapias actuales tengan algún efecto significativo. «Hay una necesidad de pruebas sensibles y específicas para el diagnóstico temprano de la enfermedad de Alzheimer», afirmó.

En el presente estudio se investigó a una población de pacientes con enfermedad ocular pero que no tenían un diagnóstico conocido de enfermedad de Alzheimer u otras formas de demencia. Los niveles de las placas beta amiloides (Aß) aumentan en el cerebro pero disminuyen en el líquido cefalorraquídeo de las personas con Alzheimer.

En el estudio se determinó si los biomarcadores conocidos para la enfermedad de Alzheimer en el humor vítreo se correlacionaban con la función cognitiva. Para ello inscribieron a 80 pacientes ya programados para una intervención de vitrectomía que luego se sometieron a un mini examen de estado mental (MMSE) para evaluar la función cognitiva. Un diagnóstico de demencia o Alzheimer no fue excluyente.

Se constató que los hallazgos son consistentes respecto a los niveles anormalmente bajos de placas beta amiloides (Aß) observados en el líquido cefalorraquídeo en pacientes con Alzheimer, en comparación con los sujetos cognitivamente normales. «El estudio confirma que los biomarcadores de la enfermedad de Alzheimer existen en el vítreo, y su correlación con la cognición sugiere que los biomarcadores de proteínas en el vítreo tienen un papel potencial como herramienta de diagnóstico temprano».

Concluyen el estudio refiriendo que los pacientes con enfermedad ocular son probablemente una población en riesgo de enfermedad de Alzheimer. “Vemos pacientes con complicaciones oculares debido a la diabetes, y la diabetes tipo 2 es un factor de riesgo bien conocido para el Alzheimer». «Por lo tanto, cualquier situación que podamos detectar en pacientes con enfermedades oculares también pueden extenderse al resto de la población» afirmó el Dr. Subramanian.

 

Cedilás Oftalmología

Director:  Dr. Gustavo Vincent

La cirugía de cataratas puede prolongar la vida

Un estudio realizado durante veinte años con 74.044 mujeres de 65 ó más años de edad, todas con cataratas, comprobó que el riesgo de muerte era un 60% menor entre las 41.735 mujeres intervenidas de cataratas respecto a las no operadas. El estudio fue realizado por Anne L. Coleman y colaboradores en el Stein Eye Institute de la Facultad de Medicina David Geffen de la Universidad de California y publicado recientemente en la revista JAMA Ophthalmology.

Las cataratas se forman poco a poco con el paso de los años y cualquier persona que viva lo suficiente puede desarrollarlas. Es la causa más frecuente de pérdida de visión en personas mayores de 40 años. Los factores de riesgo comunes incluyen exposición a los rayos ultravioletas (es decir, la luz del sol), tabaquismo, obesidad, hipertensión, diabetes, uso prolongado de corticosteroides, miopía extrema y antecedentes familiares.

“La operación de cataratas no solo puede darle una vida mejor a la gente, sino que también puede prolongársela. Las mujeres que intervinieron en el estudio y se sometieron a la operación de cataratas, vivieron más, aunque en general estaban más enfermas al inicio del estudio, tenían más infartos, enfermedad pulmonar crónica, úlcera péptica y glaucoma, en relación a las que no se operaron.

Estudios previos habían mostrado un menor riesgo de mortalidad en los hombres y en las mujeres después de la operación de cataratas. Aunque el nuevo estudio confirma los hallazgos anteriores sobre menos muertes en las mujeres, también fue lo suficientemente amplio para mostrar cómo la operación puede extender la vida. Quienes se habían sometido a la intervención por cataratas tuvieron menor riesgo subsecuente de muerte por enfermedades cardiovasculares, pulmonares, neurológicas e infecciosas, así como cáncer y accidentes.

Al explicar este resultado, Coleman dijo que cuando la gente puede ver mejor, “también puede moverse más y hacer más ejercicio. Puede ver mejor sus medicamentos y los puede identificar correctamente. La operación también mejora el estado de ánimo, también el contraste visual, lo que disminuye el riesgo de muertes accidentales por caídas o en accidentes de tráfico.

Aunque son muy infrecuentes, puede haber riesgos asociados con la intervención de cataratas, estos incluyen infección, inflamación, desprendimiento de retina y visión doble o con sombras. Sin embargo Coleman asegura que la cirugía de cataratas “probablemente es la operación más exitosa con la que contamos en la actualidad, con una tasa de éxito del 98 por ciento” pero por otro lado, comentó,  las ventajas son incuestionables.

Traducción: Dr. Gustavo Vincent

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